5 curiosidades del idioma hebreo
El hebreo es un idioma muy antiguo, aunque algo desconocido en nuestros días. Sin embargo, el hebreo sigue siendo un idioma vivo y muy usado y estudiado en todo el mundo. Desde la antigüedad el judaísmo ha empleado el hebreo como lengua litúrgica.
El hebreo es un importante nexo de unión entre las distintas comunidades judías que se esparcen a lo largo de todo el mundo, ya que es quizá la característica común más importante que tienen todos los judíos, sean de donde sean, y que siguen cultivando hoy día.
Vamos a intentar profundizar algo en el conocimiento del idioma hebreo, observando 5 curiosidades de esta lengua que bien seguro nos sorprenderán y nos ayudarán a entender y conocer mejor este singular idioma.
1. Idioma sagrado
El hebreo se considera principalmente, y de forma muy común, una lengua sagrada y se suele reservar su utilización para la oración, sobre todo por los ultraortodoxos que lo estudian y asimilan.
2. Dónde se habla el hebreo
El hebreo se habla sobre todo en Israel, aunque la expansión judía por más de 80 países distintos hace que sea una lengua muy extendida. Los Estados Unidos, que cuenta con una importante población judía, es el segundo país donde más se habla hebreo.
3. Los números hebreos
La escritura hebrea es de derecha a izquierda, sin embargo, la escritura de los números en hebreo se realiza al contrario, de izquierda a derecha. Además, los hebreos utilizan la numeración arábiga.
4. Parecido con el árabe
El hebreo y el árabe son muy parecidos, los dos son lenguas semíticas. Sus sistemas gramaticales son muy semejantes y tienen muchas palabras similares. Un ejemplo muy claro es la palabra hebrea shalom, que en árabe sería salam. Además, los hablantes de hebreo usan muchas palabras árabes como argot.
5. Alfabeto hebreo
Una singularidad del alfabeto hebreo es lo que se denomina como abjad. Esta característica indica que no es necesario escribir las vocales, sino que el sistema de escritura provee las herramientas para que sea el lector el que proporcione la vocal adecuada.
Esto hace que al principio esta lengua sea de difícil aprendizaje para los que se decidan a estudiarla. Esta característica la tiene en común con el árabe, lo que los hace dos idiomas aún más parecidos.