Consejos para estudiar francés por cuenta propia
Para ti que no tienes la oportunidad, o tal vez no desees acudir a un centro de estudios de idiomas por cualquier circunstancia, pero sientes el deseo de aprender el francés, y no sabes cómo hacerlo por cuenta propia, te proponemos una serie de consejos y alternativas que pueden serte muy útiles y fáciles de poner en práctica. Son experiencias que han dado buenos resultados a través de los años y que son fáciles de llevarlas a cabo, solo requiere voluntad y constancia. No es nada mágico, pero sus resultados suelen ser sorprendentes.
¿Por qué puede resultar fácil estudiar francés?
El francés y el español son dos idiomas hermanos, comparten raíces e historia, como consecuencia de ello, entre ambas lenguas se dan muchas similitudes léxicas, de palabras, y otras semejanzas que tratamos de exponer para facilitarte tu estudio.
- En primer lugar debes saber que entre el francés y el español abundan los «cognados», que son las palabras que tienen los dos idiomas con significados y ortografías similares y que además se pronuncian de igual forma. Por ejemplo, todas las palabras que en español terminan en –ción- en francés acaban en –tion-, como emoción-emotion, traducción-traduction…
- Muchas palabras que terminan en -dad en español, en francés acaban en -té, como pueden ser: universidad=université.
- Los vocablos españoles terminados en -ivo en francés finalizan en -if: alternatif-alternativo.
- También los acabados en -ante finalizan en -ant en francés, como en el caso de estudiante que en francés se traduce por étudiant.
Otras similitudes entre los dos idiomas
Al poco tiempo de comenzar tu estudio te darás cuenta que ambos idiomas comparten también las siguientes características gramaticales:
- El género en los nombres.
- La conjugación de los verbos.
- Dos versiones del tiempo pasado.
Todos estos parecidos hacen que el estudiante desde que comienza a aprender el francés no le parezca un idioma complicado, ni extraño, más bien al contrario.
¿Qué debes hacer?
Dadas las coincidencias y que también ambas lenguas presentan reglas gramaticales poco complicadas y muy parecidas, te debe resultar fácil establecer una serie de criterios que te ayuden al estudio de una manera ágil y sencilla:
- En primer lugar debes confeccionar una lista lo más amplia posible de las palabras que significan lo mismo y que son parecidas, estas se retienen en la memoria con gran facilidad y ya tenemos un buen camino recorrido.
- Procederás de igual forma con los infinitivos de los verbos que son similares. Pero debes ser consciente que algunas palabras y verbos que se escriben iguales a veces no tienen el mismo significado.
- Se trata de hacer una lista de coincidencias lo más completa que puedas, una especie de diccionario particular. El hecho de llevar a cabo esta labor significa que ya estás dentro mental y prácticamente del proceso de estudio. Las palabras, los verbos, etc., muy familiares para ti se quedarán grabadas en tu mente sin gran esfuerzo.
- De esta forma, te darás cuenta que antes de comenzar, ya sabes más francés de lo que creías. Para facilitarte el trabajo debes hacerte con un diccionario francés bastante completo.
Una vez confeccionada la relación de las palabras iguales y de darle varios repasos, no hace falta que las aprenda de memoria, y esta tarea es de rápida elaboración, comienzas a ver y escuchar series y posteriormente películas en francés subtituladas.
En esta nueva fase no tienes que preocuparte si al principio no entiendes nada de lo que escuchas. En You Tube hay series muy a propósito, escuchas un minuto de grabación varias veces. Como el subtítulo está escrito también en francés, lo traduces con el diccionario, lo vuelves a escuchar varias veces, hasta que lo entiendas bien sin necesidad de leer los subtítulos. Tienes que elegir una serie dedicada a la enseñanza del francés, porque la traducción que llevan a cabo a través de los subtítulos está ajustada a lo que dicen en la serie. Esto no suele suceder con las películas de largo metraje. Aquí, te reseñamos una serie muy popular que es fácil de entender, realizada exclusivamente para los que están aprendiendo el idioma:
¿Cómo practicar el francés?
Actualmente tienes a tu disposición medios suficientes para grabarte. A la misma vez que ves y estudias el video, debes ir soltándote en la pronunciación. Puedes utilizar la grabadora del traductor de Google, o cualquier otro dispositivo como el móvil que suelen tener grabadoras eficaces para escucharte y rectificar los errores.
Finalmente, tú mismo irás aplicando las medidas que consideres oportunas para avanzar, pues a partir de ahí el estudio del idioma dependerá del nivel que estés alcanzando y de las metas que te marques.
Para finalizar te proponemos…
Finalmente existe una técnica muy sencilla y a la vez muy eficaz. Se trata de colocar en las puertas de los cuartos de tu casa un pequeño cartel con el nombre de cada habitación: salle à manger, salle de bain, cuisine… Esta táctica es muy eficaz, pues crea un pequeño ambiente a tu alrededor para que tu cerebro se prepare para hacerte sentir como si estuvieses en un lugar donde se habla francés, en la misma Francia.
Estudiar por cuenta propia tiene su atractivo, vas a tu ritmo, repites cuantas veces quieras la pronunciación de una palabra o frase, hasta que te satisfaga el resultado. Por otro lado, no existe ningún impedimento psicológico para equivocarte, al revés, lo tomas bien y puedes repetir la palabra o frase mal pronunciada cuantas veces necesites hasta coger la pronunciación correcta. Es decir, el estudio en solitario tiene su atractivo, pero no puedes olvidar que se trata de un idioma que a menos que te dediques a las traducción escrita solamente, no tiene ningún sentido no entrar en contacto con otras personas especialmente francesas para practicar. Y como tú eres el alumno y también tu profesor, debes saber cuándo estás en condiciones para practicarlo abiertamente, pues el fin de una lengua extranjera es ese.